“Los valores esenciales son lo que realmente importa”
Creado por: Lola Ferrin
“Mantente siempre ilusionado, reten los sueños que has atesorado, esto nos está enseñando bastante sobre nuestra humanidad, y a revaluar nuestras metas como civilización”.
Con este mensaje esperanzador el profesor Daniel Elías Nuñez López, de la carrera de Matemáticas Aplicadas, invita a los estudiantes de la Javeriana Cali a luchar por sus sueños en medio de la cuarentena.
Él, que lleva 26 años en la docencia, está convencido de que confiar en Dios, trabajar mucho y estudiar hasta el cansancio es lo que permitirá transformar la realidad.
Dice que ante esta situación “no se vale parar” porque sabe que quedarse congelado en el tiempo no es la salida a una crisis que podría extenderse un poco más, pero sin dejar de ser la invitación a reinventarnos.
Por eso, cuando se implentó la cuarentena nacional y los docentes se vieron en la necesidad de volcarse a la virtualidad, lo primero que hizo fue comprarse un tablero para contar con herramientas físicas que le permitieran explicar durante las clases remotas, y sin limitación alguna, los ejercicios que enseña en sus clases, un gesto que fue bien recibido por los estudiantes.
En esa medida, su invitación a los otros profesores es a que “sigan haciendo esta gran labor, y que apliquen todo lo que aprendieron para que sus clases sean cada vez mejor, y su relación con los estudiantes sea mucho más cercana y mucho más humana. Todo esto nos hará mejores javerianos para el mundo”.
Daniel, oriundo de Venezuela en donde dictó clases en la universidad pública, reconoce que la falta de contacto con otras personas es lo que más duro le ha dado, pero aguarda con paciencia el final de la emergencia de salud pública para volver a esos días en los que era permitido salir a tomarse un café con sus allegados, además de cantar con sus compañeros del coro javeriano al cual pertenece.
Sin embargo, es el Magis el valor esencial que le ha permitido mantenerse a flote. Eso y la compañía de los miembros de su familia, con quienes ha podido conversar más “y lograr mayor conexión”.
“El Magis, buscar siempre la excelencia a pesar de las adversidades, y tratar de ver las dificultades como oportunidades que nos traen aprendizajes definitivos, reconociendo nuestras limitaciones y ratificando nuestros anhelos. Como cristiano esta situación también ha fortalecido mi fe y mi dependencia de Él”, asegura con convicción.
Quizá por eso cuando se le pregunta por ese aprendizaje que más atesora en medio de la crisis, no duda en contestar que se trata de los valores esenciales, “lo que realmente importa”.
“Es como si pudieses ver con mayor claridad el mundo en que vivimos y cuál es tu papel en él. Es necesario poder servir a otros para poder vivir una vida con propósito y significado”, explica.
En cuanto a su experiencia con la virtualidad y las clases remotas, confieza que no es un experto, y aún hace cosas muy básicas, pero se ha empeñado en “mantener el espíritu en las clases sincrónicas” como lo hacía en el salón de clases.
“Estoy siguiendo las recomendaciones del Centro para la Enseñanza y el Aprendizaje y del Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación de la universidad, en la medida en que me son prácticas y útiles para minimizar el impacto psicológico en los estudiantes con esta forma de trabajo a la que no están acostumbrados. El acompañamiento ha sido clave para que mantengan el ánimo arriba”, afirma el docente.
Así es como tomó la decisión de concentrarse en presentaciones, videos cortos en algunas ocasiones y mantener una buena comunicación por la red.
“Creo que el diseño de actividades remotas serán un aliado fundamental para mejorar los procesos de enseñanza-aprendizaje cuando regresemos a las labores en el campus, esto parece que se quedará en nuestras prácticas educativas y tiene muchas ventajas”, puntualiza.
En sus palabras
“En este tipo de contingencias hay que tomar la vida con optimismo y ver muchas oportunidades para crecer en medio de la crisis. En definitiva las crisis nos llevan siempre al camino de lo esencial en la vida, a los valores esenciales, es menester que no los olvidemos. Ser respetuoso de los otros, empáticos con la situación de cada persona, saber que todos somos seres humanos con defectos y virtudes, en definitiva amar y servir debe cobrar total sentido para todos en esta contingencia”.